Se yergue mi rosal de cálidos colores salpicado,
atrás quedó la zarza enmarañada de rocío perlado.
Se ha levantado el sollozo transformado en grito de júbilo,
cual ruiseñor entonando su canto.
Se ha sonreído el alma mirando al cielo.
La rima se ha hecho clavel, la paz alfombra y la dicha guitarra.
30
Dic
2012
2012
Categoría: Obras
Etiquetas: literatura, obras, poesía, sensaciones
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